jueves, 18 de febrero de 2010

Tatjana Hauptmann


Photo: Copyright © Regine Mosimann / Diogenes Verlag AG Zürich

Tatjana Hauptmann, autora del álbum ilustrado Adelaida va a la ópera, tiene una trayectoria impresionante. Nació en la Alemania de la posguerra en el año 1950, en la ciudad de Wiesbaden. Su pasión por la ilustración le viene de lejos, pues nos cuenta que con 4 años ya dibujó su primer retrato realista: el de su madre. Durante su infancia le gustaba observar e ilustrar a personas de la calle con la ayuda de su memoria fotográfica. Eran tiempos duros, y dibujar era una forma de evadirse y compensar la miseria que se vivía en la escuela. Ilustró y escribió sus dos primeros libros infantiles con tan sólo 13 años (Pony komm, wir kaufen was y Arne, der kleine Wikinger), que gestó en la Escuela de artes y oficios de Wiesbaden, donde le permitían acudir al curso nocturno de escritura.

Ambos libros se expusieron en el Museo Klingspor de Offenbach en 1964. En aquella exposición, descubrió por vez primera el trabajo de Tomi Ungerer, que la fascinó y la empujó a dedicarse por completo a la ilustración. El mismo Ungerer, al ver los libros de Hauptmann publicados por Diogenes a finales de los años 70, le escribió una carta entusiasta y alentadora.

Ingresó en la Escuela de artes y oficios de Wiesbaden en 1966, pero dos años más tarde decidió interrumpir sus estudios para dar a luz a su hijo David. Poco después, empezó a dibujar para una serie de animación de la televisión alemana ZDF, al tiempo que continuaba ilustrando por su cuenta y realizando exposiciones.

En 1977, se presentó en el estand de la editorial suiza Diogenes con su libro Ein Tag im Leben der Dorothea Wutz (Un día en la vida de Dorothea Wutz, inédito en nuestro país) bajo el brazo, quienes se enamoraron de su trabajo y han publicado sus libros hasta el día de hoy.

Recientemente, y por encargo de Diogenes, ilustró el libro El ruido que hace alguien cuando no quiere hacer ruido, de John Irving, publicado en España por Tusquets editores.

Tatjana participa, a veces, en lecturas o firmas de libros pero admite que, en general, lleva una vida retirada y solitaria.

Os contaremos más sobre qué la inspiró a escribir Adelaida va a la ópera cuando publiquemos el libro en el mes de abril. ¡No os lo perdáis!

miércoles, 17 de febrero de 2010

Magali Le Huche


Magali Le Huche es la autora de dos de nuestras novedades del mes de abril: Las sirenas de Belpescão y Berta Buenafé está triste...





Algunos la conoceréis porque la editoria Adriana Hidalgo sacó al mercado a finales de 2009 su libro Héctor, el hombre extraordinariamente fuerte.



Hemos tenido la oportunidad de entrevistar a Magali para que podáis conocerla un poco mejor. Os copiamos parte de la entrevista; el resto... ¡cuando se publiquen los libros! (Hay que mantener un poco el misterio...)

Flamboyant: ¿Podrías hablarnos un poco de tu carrera? ¿Qué te inspiró a ilustrar libros infantiles?

Magali: Estudié en la Escuela de artes decorativas de Estrasburgo y terminé en el 2004. Creo que ya tenía ganas de escribir historias y dibujar antes de ingresar en ella. Siempre me ha gustado dibujar. Cuando era pequeña, pasaba horas haciéndolo y, mientras dibujaba me explicaba historias a mí misma. Por ello, naturalmente, me hice ilustradora. Desde entonces continúo haciendo lo mismo. Cuando era pequeña, los libros me ayudaban a dormir y también el dibujo.

Flamboyant: ¿Cuáles han sido tus influencias, tus autores e ilustradores favoritos?

Magali: Mi infancia transcurrió con los libros de Tomi Ungerer, Quentin Blake, Roald Dahl, Maurice Sendak, Pef, Richard Scarry. Mis padres también tenían muchos libros de Sempé en casa.

Flamboyant: ¿Qué te resulta más fácil: ilustrar tus propios textos o los de otros?

Magali: Tardo más tiempo en ilustrar mis propios textos, ya que me paso mucho rato con cada uno. Pero es, sin punto de comparación, ¡lo que más me gusta! Escribir supone mucho trabajo, ya que para mí es menos natural que el dibujo, pero aún así tengo muchas ganas de explicar cosas. Entonces, entre el momento en que me surge una idea para una historia hasta que se escribe el texto ¡puede pasar mucho tiempo! Cuando escribo la historia, tengo al mismo tiempo ganas de crear imágenes, pero es necesario que ambas cosas sean coherentes, que el texto no sea demasiado complicado… Puede parecer sencillo, ¡pero puede resultar largo y complicado! Ilustrar el texto de otra persona es distinto y también me gusta. En seguida tomo la distancia necesaria para ilustrar sin tener que rehacer el texto una y otra vez. ¡Es muy agradable!

Flamboyant: ¿Qué crees que añade el texto a las ilustraciones y viceversa? ¿Qué relación te gusta establecer entre la historia en el texto y la de las ilustraciones?

Magali: ¡Ése es el gran problema de la ilustración! Creo que lo importante es poder explicar cosas a diferentes niveles: explicar con las imágenes lo que el texto no dice y eludir los detalles que el texto explica pero que no están ilustrados. Lo más importante, pienso, es no ilustrar al pie de la letra todo aquello que explica el texto, si no el aburrimiento está garantizado. Resulta interesante dar otro punto de vista al texto gracias a la imagen, sorprender con la imagen. Y que la imagen deje vivir también al texto. Es importante que los dos estén en concordancia pero que al mismo tiempo sean independientes. ¡Igual que una pareja!

Flamboyant: ¿Participas en todos los aspectos de la producción de los libros, como el diseño gráfico o el uso de la tipografía?

Magali: No siempre resulta fácil participar en todo, ya que las editoriales tienen elección final de la tipografía y la cubierta. La elección del papel normalmente se decide en función de las colecciones y de los formatos estándar que hay en stock y hay que ponerse de acuerdo. Pero poco a poco comprendo mejor el proceso de fabricación y lo que es posible, lo que hay que proponer y discutir; siempre hay posibilidades. En todo caso, estos aspectos cada vez me preocupan más y cada vez me resulta más importante participar en ellos… ¡La calidad del objeto final también puede cambiar la forma de trabajar!

Flamboyant: ¿Qué criterios utilizas para hacer la ilustración de la cubierta?

Magali: Los criterios para una cubierta son los de hacer una imagen impactante, entendedora y que comunique la atmósfera y el tema de la historia sin decir demasiado… ¡Es un trabajo de publicidad en mayúsculas!

Flamboyant: ¿Estás en contacto con tus lectores?

Magali: Realizo encuentros en clases o bibliotecas de escuelas de forma regular. Siempre son momentos impactantes y muy enriquecedores. La profesión de ilustradora es una profesión solitaria y recibir interacción de niños que tienen un montón de preguntas, las cuales han trabajado mucho, me permite cuestionarme a mí misma. A menudo son momentos muy conmovedores y ¡para mí es un regalo muy bonito!

Flamboyant: ¿Tienes una idea preconcebida de qué niños leen tus libros?

Magali: ¡No tengo ni idea! Normalmente me encuentro con niños de entre 5 y 10 años. Pero creo que se pueden leer libros a niveles diferentes a edades distintas.¡ Lo que espero es que los padres también disfruten de ellos!

¡Gracias, Magali!

¡No os perdáis las dos joyas de Magali que sacaremos a la venta el mes de abril!

jueves, 4 de febrero de 2010

Fichas de las novedades

Ahora que ya habéis visto las cubiertas de nuestras novedades, os queremos mostrar las fichas, que contienen algo más de información... Pronto os daremos más detalles.








martes, 2 de febrero de 2010

Novedades de abril y mayo

¡Hacía tiempo que no os poníamos al día! Hemos estado trabajando en la producción de cuatro nuevos títulos y no hemos tenido tiempo para actualizar el blog.

De momento, os avanzamos las cubiertas de estas novedades y en los próximos días os daremos más detalles de cada título.

Como veréis, estos álbumes ilustrades siguen una línea totalmente distinta a la de la colección Pequeños grandes tesoros, pues nuestra intención es introducir a los niños en todo tipo de estilos e historias, sin perder, claro está, la calidad. Son libros divertidos, tiernos y conmovedores de tres importantes autoras e ilustradoras que no dejarán indiferentes a vuestros hijos.

¡Pronto podréis disfrutarlos!